El Consejo de Política Fiscal abordará además la deuda y el gasto regionales
El Ministerio de Hacienda contempla compartir con las autonomías parte del margen que la Comisión Europea podría dar a España para reducir su déficit. El Gobierno en funciones pretende conseguir de Bruselas una senda más realista para reconducir el agujero presupuestario y abre la puerta a que parte de ese oxígeno pueda ir a parar a las autonomías. De hecho, las nuevas previsiones que el Ejecutivo va a enviar a Bruselas contemplan un déficit público del 3,6% del PIB para este año y del 2,9% para 2017.
Ésta fue una de las principales peticiones que los Ejecutivos territoriales hicieron al ministro en funciones, Cristóbal Montoro, durante la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), celebrado el pasado viernes. El propio Montoro dejó claro entonces que cualquier solicitud de este tipo debe ir precedida de un esfuerzo claro de contención por parte de todos.
En este mismo sentido, el número dos del Ministerio, Antonio Beteta, confirmó ayer que la nueva senda de estabilidad que el Gobierno aprobará el próximo 29 de abril será más realista y afectará "a todos los sectores", con el objetivo de generar crecimiento y credibilidad.
Ayer comenzaron las negociaciones bilaterales entre el Ministerio y las autonomías para revisar la situación de cada una de ellas y pactar cómo pueden cumplir con el objetivo de déficit de este año (que, en principio, estaba fijado en el 0,3%). Estos trabajos se han iniciado con las que están adheridas al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), dado que tienen pendiente enviar a Hacienda los planes de ajuste necesarios para poder acceder al mecanismo.
Si hubiera avances, alguno de estos planes podrían aprobarse ya en el Consejo de Política Fiscal y Financiera que se celebrará esta semana. El objetivo es que las regiones puedan empezar a recibir ya las cantidades correspondientes al FLA del primer trimestre de este año.
Nuevo cónclave autonómico
Esa nueva reunión del cónclave autonómico servirá para dar luz verde a las nuevas sendas de déficit, deuda y gasto territoriales. Las Comunidades se desviaron el año pasado casi en un punto del límite del 0,7% que se les exigía (cerraron con un desequilibrio equivalente al 1,66% de su PIB). El propio Beteta recordó que en el CPFF del pasado viernes, todas las autonomías expresaron su voluntad de avanzar en la estabilidad presupuestaria, a la vez que pusieron de manifiesto la dificultad de cumplir en "los términos y ritmos fijados en el procedimiento".
A esta reunión seguirá, la próxima semana, una convocatoria de la Comisión Nacional de la Administración Local (CNAL), en la que el Gobierno en funciones trasladará a las entidades locales cuáles son sus objetivos de estabilidad.
Al margen de los municipios, entre quienes sí cumplieron sus metas el año pasado se encuentran Galicia, Canarias y País Vasco. El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, volvió a reclamar ayer una compensación para las comunidades autónomas que se ajustaron el año pasado a lo exigido, frente a las que deberán trabajar para corregir sus "desfases".
Durante su intervención en un acto organizado por El Mundo, Feijóo pidió algún tipo de estímulo para quienes hacen sus deberes y aseguró que Galicia también cumplirá este año con el déficit, aunque haya elecciones.
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