Buscar este blog

lunes, 16 de noviembre de 2015

Banca y gobierno

Carlos Rodríguez Braun

Dirá usted: no se puede desbarrar más. Pues sí se puede.

 

 
El distinguido periodista canario Antonio Salazar me brinda otra vez una joya de don Antonio Morales, nuevo presidente del Cabildo de Gran Canaria y antiguo alcalde de Agüimes, titulada "El gobierno de la banca".
 
Llega a afirmar: "El sistema financiero pone y quita gobiernos y decide las políticas públicas, movido puramente por la codicia y sin ningún tipo de pudor. La democracia, la justicia social, el Estado de Bienestar son, por supuesto, meras rémoras que no generan sino molestias y obstáculos para sus prácticas mercantiles". El negro futuro del inmenso poder de la banca: "El neoliberalismo habrá conseguido así reducir el Estado y la democracia a la mínima expresión".
 
Es difícil decir más falsedades en menos espacio. Cualquiera sabe que cada vez hay más democracia en el mundo, y los Estados son cada vez más grandes: lo que sucede es exactamente lo contrario de lo que don Antonio dice que sucede.
 
Aparte de lo irrisorio que resulta que la todopoderosa banca, que "pone y quita gobiernos", no haya sido capaz ni siquiera de recortar su propia carrera política en Canarias, notablemente exitosa, el señor Morales no dedica ni un segundo a reconocer la realidad de su mundo más cercano: la política. Así, proclama que "los bancos nos llevaron a la crisis", y no dice ni una palabra sobre los bancos centrales, como si no tuvieran responsabilidad alguna. Y llega al absurdo paranoide de proclamar que las cajas de ahorro españolas, modelo de banca pública, no colapsaron por su mala gestión, y naturalmente tampoco por la corrupción de políticos y sindicalistas variopintos que en ellas medraron, sino por "una maniobra perfectamente calculada": era una conspiración del “proyecto neoliberal tendente a crear un oligopolio financiero mundial”. Con un par.
 
Dirá usted: no se puede desbarrar más. Pues sí se puede. Nos advierte el señor Morales de que el banquero es un hombre muy peligroso porque "controlará la deuda y la financiación de los partidos políticos". ¡Pero si los partidos políticos se endeudan con los banqueros y después no les pagan!

No hay comentarios:

Publicar un comentario