La industria gana peso en el Ibex 35
Acerinox vuelve a formar parte del índice un año y medio después de abandonarlo
MARÍA FERNÁNDEZ
Bobinas de acero laminadas.
El comité asesor técnico del Ibex 35 anunció el pasado martes la vuelta de Acerinox a la lista de empresas más negociadas de la Bolsa española. La compañía se reincorporará a este selecto club a partir del próximo 22 de junio tras un año y medio de ausencia. Una buena noticia para un grupo que en 2014 duplicó su Ebitda, hasta los 454 millones y obtuvo un beneficio neto de 136 millones, 6,2 veces mayor que el del ejercicio pecedente. Acerinox tuvo unas ventas el año pasado de 4.380 millones, un 10% más, y su deuda financiera, de 616 millones, supone el 33% de los fondos propios.
Según su consejero delegado, Bernardo Velázquez, su fortaleza ha estado en el exterior: “Tenemos fábricas en cuatro continentes, vendemos en 83 países, esto nos ha ayudado muchísimo a pasar la crisis. Nos hemos mantenido fieles a la estrategia, a las inversiones y a la retribución al accionista. Después de los resultados de 2014 volvemos a donde estábamos”, aseguraba hace un par de semanas, en un encuentro con la prensa.
A medio plazo la compañía espera aflojar el ritmo. “Los resultados del primer trimestre han sido buenos, un 24% mejores, pero durante el año vamos a tener altibajos, porque ya estamos en una fase de recuperación, no podemos seguir manteniendo los crecimientos de los últimos tiempos”.
Para César Sánchez-Grande, responsable de Small & Medium Caps de Ahorro Corporación, Acerinox es un valor ganador a corto plazo. “Creemos que el precio objetivo está en 19,2 euros [el viernes cerraba a 13,9 euros]. Veremos cómo durante este año irá de menos a más, aumentará su volumen de ventas en el mercado europeo por medidas antidumping contra entrada producto chino y taiwanés”. Sánchez-Grande es consciente de que no doblará resultados pero pronostica un incremento del 30% del beneficio y añade que la ausencia de nuevas fábricas en el mercado asiático hará que la capacidad de producción se normalice.
El presidente de la compañía, Rafael Miranda, ya avanzaba esa posibilidad hace unos días. “Si de verdad en China hay un cambio de paradigma… China ha estado practicando una política industrial tremendamente agresiva, con criterios poco homogéneos con el mundo occidental. Si se empieza a considerar el medio ambiente como un tema importante en China, si empiezan a pensar que no pueden instalar capacidad sin que tenga sentido... Creo que la expectativas son buenas”.
En cuanto a la acción, la opinión de los analistas es abiertamente positiva. Según datos de Bloomberg, el 75% aconseja comprar mientras que un 21% tiene una posición neutra sobre el valor y sólo un 4% recomienda vender.
¿En qué cambian las cosas al estar dentro del Ibex? “Se trata de una muy buena noticia que dará mayor liquidez y visibilidad a la compañía”, asegura Miranda, que no hace tanto reconocía que tras un año y medio fuera del Ibex la evolución de la cotización había sido francamente positiva: “Todo hay que relativizarlo”, pensaba antes de entrar en el selectivo. En cualquier caso, considera que la decisión de Bolsas y Mercados es positiva para la industria porque visibiliza el sector y va en consonancia con una tendencia en Europa, que parece querer hacer “una reindustrialización inteligente y competitiva” en el continente.
Pese a todo, el mercado no oculta algunos nubarrones para el futuro de los productos de acero. El precio del níquel, al que se debe más de la mitad del precio de la tonelada de acero, está en mínimos. “Desde septiembre han ido cayendo y ahora están en niveles muy bajos. Eso tiene su parte positiva y negativa. La positiva es que se fomenta el consumo y las nuevas aplicaciones del acero inoxidable”, señala su consejero delegado. Lo malo es que en esos mínimos, solo pueden esperar que los precios de su producto suban.
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