Subir o no subir – esa cuestión sigue girando en torno a la Reserva Federal. Sin embargo, opaca una pregunta aún más importante: ¿Qué significa realmente para el inversionista en oro?
Como expliqué la semana pasada, la Reserva Federal se encuentra en un escenario en el que está condenada ya sea que suba las tasas o no. Independientemente de cualquier noticia económica que salga de Washington D.C. en las próximas semanas, el banco central tiene bastantes razones para no elevar las tasas. Como hemos argumentado por meses, la economía simplemente no puede sostener un alza en las tasas de ninguna cantidad significativa en el largo plazo. Pero si la Reserva Federal se resiste a cumplir con el aumento una vez más, su credibilidad recibirá otro golpe.
Así que, podría impulsar el aumento en las tasas este mes. O bien, puede aplazarlo una vez más. Pero ¿qué significa esto para el oro? ¿Realmente importa en el largo plazo?
En realidad no. Hay más fundamentos importantes a considerar.
El saber convencional sostiene que, si la Reserva Federal eleva las tasas, es fuerte para el dólar estadounidense, por lo tanto, el oro debe bajar en términos del dólar. O, por el contrario – si la Fed decide no elevar las tasas, eso debe ser alcista para el oro y por lo tanto subirá en términos de dólares.
La verdad es que ambas narrativas son equivocadas porque se basan en premisas superficiales y erróneas. No toman en cuenta el hecho de que el oro es un producto monetario. Como resultado, desafía explicaciones simplistas en cuanto a su precio en relación al dólar. En lugar de eso, deberían ver al oro como el único activo monetario líquido sin contraparte de riesgo en un mundo en el que prácticamente todo producto similar carga con un enorme riesgo inherente.
Un simple vistazo a la historia nos muestra tiempos en que el precio del oro en dólares se elevó durante periodos de aumento en las tasas de interés. También registra momentos en que el precio del oro en dólares ha declinado durante un periodo de caída de las tasas de interés. Esto en realidad sucedió a lo largo de los últimos dos o tres años. La siguiente gráfica ilustra bien este punto.
Las tasas de interés se dispararon después de que Nixon desligó al dólar del oro en 1971, y el precio del oro en dólares subsecuentemente se movió de alrededor de $150 a más de $600 hacia finales de la década. El aumento en las tasas a principios del 2000 repitió el mismo fenómeno.
En pocas palabras, un aumento en las tasas puede o no, hacer caer al oro.
Una vez más, tienen que pensar en el oro como un producto monetario. Por otro lado, los dólares estadounidenses (y cualquier otro papel con rostros del gobierno impresos en él) son simplemente una promesa de pago – un pasivo. En verdad, las monedas fiduciarias no son más que la puerta externa hacia una terrible montaña de deuda de la que nadie sabe cómo deshacerse.
La carga de esta deuda continúa creciendo. De hecho, debe crecer. El sistema está hecho de esa manera. A medida que la deuda crece, también lo hace la presión sobre el sistema. Se convierte en más que una sobrecarga simplemente pagar el interés nominal. A medida que la capacidad de pago se vuelve más dudosa, el riesgo de impago crece. Si la deuda pública incumple, el sistema entero está en riesgo de colapsar.
La burbuja estallará.
Como activo monetario y unidad de capital, el oro ofrece una protección superior contra tal sistema colapsado, sin importar cómo jueguen los banqueros con él.
Un aumento en las tasas podría afectar al precio del oro en el corto plazo, pero no eliminará la pila de deuda o las cuestiones económicas subyacentes. De hecho, un aumento en las tasas agravará la deuda al elevar el costo de esos pagos de intereses nominales.
Así que la conclusión final es no dejarse atrapar en la propaganda del aumento en las tasas y el impacto en el corto plazo que pueda o no, tener sobre los precios del oro. Como Peter lo expuso el mes pasado, sin importar lo que la Reserva Federal haga, resultará alcista para el oro en el largo plazo. Mientras tanto, simplemente agradezcan a la Reserva Federal por la oportunidad de comprar oro por menos de $1,100 la onza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario