Los productos básicos de la cesta de la compra crecen más que pensiones y salarios

Finalmente, el índice de precios al consumo ha 

cerrado el año en el 0% tras una ligera 

remontada en el mes de diciembre después de 

cuatro meses consecutivos de caídas

Carlos Sanchez

Los datos están aquí. Y ponen de relieve que los productos consideradosbásicos dentro de la cesta de la compra han subido en este 2015 que termina muy por encima de lo que han crecido tanto las pensiones como los salarios.

Los datos no están cerrados (falta el mes de diciembre), pero hasta noviembre los alimentos y las bebidas no alcohólicas, que suponen una gran parte del presupuesto familiar, han aumentado de precio un 1,7%. En el caso de los alimentos sin elaborar, se han encarecido un 2,4%. Por lo tanto, por encima del 0,25% que subieron las pensiones en 2015 y del 0,8% que se han incrementado los salarios, según la Comisión Consultiva de Convenios Colectivos.

La 'Encuesta de presupuestos familiares' refleja que la segunda partida de gasto de los hogares es la alimentación (4.028 euros anuales respecto a un total de 27.038), pero esta proporción -un 14,9%- aumenta a medida que disminuye el nivel de renta. O expresado de otra forma, los hogares con menos recursos son aquellos que gastan más en alimentación, que es, precisamente, la rúbrica que más sube en el índice de precios al consumo (IPC). En particular, en los pensionistas, donde prácticamente el 100% de sus rentas se destina a alimentación y a mantenimiento del hogar (agua, gas y electricidad).

Como indica el INE, la composición del hogar es un factor muy determinante de la estructura de gasto del mismo. Así, los hogares formados por una persona o una pareja de 65 o más años fueron los que en 2014 dedicaron mayor parte de su presupuesto a vivienda, agua, electricidad y combustibles para la vivienda (42,2%), a alimentos y bebidas no alcohólicas (16,5%) y a salud (5,3%).

Fuente: INE.

La rúbrica que más pesa en la cesta de consumo familiar, en términos generales, es la que refleja el gasto en vivienda, electricidad, agua y combustibles. Esta rúbrica es, precisamente, la que más ha bajado en 2015 debido al desplome de los precios del crudo. Hasta noviembre ha caído un 2,6%, lo que explica que el IPC adelantado se haya situado en el 0,0% en el conjunto de 2015.

Este indicador proporciona un avance del IPC que, en caso de confirmarse, supondría un aumento de tres décimas en su tasa anual, ya que en el mes de noviembre esta variación fue del -0,3%. En este comportamiento destacan los carburantes y lubricantes (gasoil y gasolina), cuyos precios bajan menos que en 2014. Es decir, han seguido bajando, pero debido a que en diciembre cayeron prácticamente el doble, se ha producido un ligero repunte de la inflación que más afecta al consumidor.