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viernes, 19 de diciembre de 2014



Más mentiras de Washington sobre deuda y gasto

19 Diciembre, 2014
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Recientemente, el secretario del Departamento del Tesoro declaró que “Las políticas del presidente y un fortalecimiento de la economía de EE. UU. han generado una reducción del déficit presupuestario de EE. UU. de cerca de dos tercios, la reducción sostenida del déficit más rápida desde la Segunda Guerra Mundial”. Y “el déficit en el año fiscal de 2014[1] ha caído a 483.000 millones de dólares”.
Mucha gente se ha tragado esta afirmación, incluyendo el economista ganador del Nobel Paul Krugman. “Así que lo supisteis antes aquí: mientras no mirabais y los regañones del déficit regañaban, el problema del déficit (tal y como era) se estaba resolviendo en su mayor parte”.

La toma federal de préstamos continúa

Aparentemente, Krugman no leyó el resto del informe del Tesoro. La página uno de este mismo informe aclara el asunto, diciendo: “el aumento en la toma de préstamos incluyó 483.000 millones de dólares en préstamos para financiar el déficit y 314.000 millones de dólares en préstamos relacionados con otras transacciones”. “La toma federal de préstamos de otros aumentó en 798.000 millones de dólares”. Las propias cifras del Departamento del Tesoro no dicen que el muy publicitado déficit es una mentira.
Este déficit de 798.000 millones de dólares es una cifra de déficit más apropiada para el año fiscal 2014. Según el informe del Departamento del Tesoro sobre La deuda pública hasta el penique, la deuda del año fiscal 2014 aumentó en 1.085.9000 millones. Sin embargo, esto incluye el aumento en la deuda intragubernamental de 277.200 millones. Así que la deuda anual para el público aumentó en 808.700 millones. Aunque hay un diferencia menor es estas cifras, podemos estar de acuerdo en que el déficit anual estuvo en torno a los 800.000 millones de dólares, no los 483.000 millones.

¿Qué es la deuda intragubernamental?

Un hecho evidente acerca de la declaración del secretario del Tesoro es que ignora la deuda intragubernamental. El gobierno federal tiene actualmente más de 5 billones de dólares de deuda intragubernamental. Los federales, a lo largo de los años, han recaudado 5 billones de dólares en impuestos y luego han gastado estos ingresos fiscales. Sin embargo, antes de gastar este dinero, se lo han prestado a sí mismos. Cuentan el dinero que se prestaron a sí mismos como deuda intragubernamental. Solo los gobiernos creen que prestarte a ti mismo es una deuda legítima. La recientemente declaración del Departamento del Tesoro ignora justificadamente este engaño contable.
El aumento de la deuda de 808.700 millones de dólares es un aumento del 6,7% en la deuda en un año. Es una media de 2.200 millones de deuda adicional cada día o 92 millones tomados prestados cada hora. Esto equivale a en torno a 2.500$ de duda por cabeza, unos 10.000$ de deuda adicional para la familia media de cuatro.

La carga de la deuda sigue siendo enorme

Las dos administraciones anteriores tienen un historial de déficits récord. Según el Departamento del Tesoro, durante el mandato de George W. Bush, la deuda que tenía la gente, de nuevo estoy ignorando la deuda intragubernamental, aumentó de 3.339.300 millones de dólares a 7.551.900 millones.[2] Eso es un aumento de 4.212.600 millones de dólares o un 126% en los años de Bush.[3]En los primeros cinco años de Obama en el cargo, la deuda con el público aumentó en 12.785.000 millones de dólares. Es un aumento en cinco años del 69% o un aumento anual medio de 1.406.600 millones. Esta deuda pública total de 12.785.000 millones de dólares equivale a unos 40.000$ por cara hombre, mujer y niño en el país.
El gráfico muestra las tendencias para la cantidad de deuda y el aumento anual en la deuda desde 2001 (en miles de millones de dólares).
Mientras que el déficit anual ha tendido recientemente a la baja, una mirada al presupuesto de 2014 hace difícil sostener la afirmación de que el problema del déficit se haya resuelto.
La Declaración Diaria del tesoro del 30 de septiembre de 2014 nos proporciona detalles acerca del presupuesto del año fiscal 2014. La partida más grande en Depósitos del Tesoro es la Emisiones de Efectivo de Dueda Pública de 7.519.500 millones de dólares. Esta es la cantidad total de toma pública bruta de préstamos para 2014. El gobierno tiende a emitir deuda pública a corto plazo que refinancia rápidamente para ahorrar en pagos de intereses. El gobierno federal tomó prestados estos 7,5 billones de dólares en 2014 para pagar bonos que iban venciendo, para pagar los intereses sobre estos bonos y para pagar el resto del déficit presupuestario. Aunque la deuda aumentara solo en 800.000 millones de dólares, el gobierno federal tiene que encontrar prestamistas que estén dispuestos a prestar al menos 7,5 billones de dólares anuales. Esa cifra aumentará al incrementarse la deuda en el futuro.

Baja los tipos de interés o sufre las consecuencias

Para aprovechar los bajos tipos de interés, los federales están refinanciando más de la mitad de su deuda anualmente. El problema con esa estrategia es que los tipos de interés pueden no permanecer tan bajos mucho tiempo. En el lado del gasto de la declaración del Tesoro, vemos que los pagos de intereses de 2014 totalizaron 223.300 millones de dólares. En los últimos años, al ir aumentando la deuda, los pagos de intereses han permanecido relativamente estables. Desde septiembre de 2001, la deuda en poder del público ha aumentado un 283%, aunque los pagos de intereses sobre esa deuda solo han aumentado un 37%. Esto se debe que los tipos de interés se han desplomado mientras la deuda ha aumentado.
Si los tipos de interés vuelven a una media más normal históricamente, los pagos de intereses se dispararán. El tipo medio de interés sobre la deuda para septiembre de 2014 era del 2%. Incluso sin un aumento en la deuda, si el tipo medio de interés sobre la deuda vuelve a su nivel pre-recesión de septiembre de 2007, el pago anual de deuda estaría por encima de los 500.000 millones de dólares. Dadas las políticas monetarias de los últimos años, los tipos de interés podrían fácilmente aumentar a sus medias de septiembre de 2000. Si eso ocurre, el interés sobre la cantidad actual de deuda sería de más de 700.000 millones de dólares.
Dados los aumentos proyectados en la deuda, no sería sorprendente ver pagos anuales de intereses superarían en cuádruplo en los próximos años. David Walker, el anterior jefe de la Oficina de Contabilidad del Gobierno, concluye que para 2022 “los pagos de intereses se convertirán en el gasto más grande” en el presupuesto público.[4]

Los subsidios no van a desaparecer

Los subsidios son el otro gran asunto presupuestario. Para 2014, los desembolsos en prestaciones de Seguridad Social fueron de 905.800 millones de dólares. El gasto de Medicare y Medicaid sumó 900.400 millones (295.7000 millones para Medicaid y 604.700 millones para Medicare). Los pagos por estos subsidios se prevé que aumenten enormemente en los próximos años, al aumentar el número de receptores de estos programas debido al envejecimiento de la población de EE. UU.. Una buena parte del crecimiento del agujero fiscal se debe a los grandes déficits previstos por estos programas.
Como se veía en la tabla anterior, el déficit del presupuesto tendió a la baja desde su máximo en 2009, aunque aumentó ligeramente en 2014. Aunque las proyecciones presupuestarias no dicen que esta tendencia a la baja puede continuar durante los próximos años, el problema del déficit no se ha eliminado.
Los pagos de intereses y subsidios pronto se dispararán. La próxima recesión traerá más paquetes de estímulo. Los políticos comprarán votos añadiendo programas de gasto al presupuesto y serán reticentes a pagar su gasto con ingresos fiscales adicionales. Volveremos a ver récords en déficits.


[1] El año fiscal del gobierno acabó el 30 de septiembre.
[2] Los ocho años de Bush empezaron el 30 de septiembre de 2001 y acabaron el 30 de septiembre de 2009. El quinto año fiscal de Obama acabó el 30 de septiembre de 2014.
[3] Reconozco que una pequeña parte del gasto en el presupuesto de Bush pude atribuirse al paquete de estímulo de Obama de 2009.
[4] Ver Walker, Comeback America, p.15. La proyección de Walkerse basa en una simulación del presupuesto de la OCG.

Publicado originalmente el 8 de diciembre de 2014. Traducido del inglés por Mariano Bas Uribe. El artículo original se encuentra aquí.

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